La Copa del Mundo de Turismos, heredera del WTCC, ha terminado sus entrenamientos oficiales de pretemporada en el Circuit de Barcelona-Catalunya, antes de dirigirse a Marruecos para disputar el primer fin de semana de carreras del año. Los participantes del WTCR han podido trabajar en la puesta a punto de los coches antes de que empiece una batalla sin piedad por llevarse a casa el título de campeón.
Todas las estructuras han hecho acto de presencia en el trazado catalán, aunque han habido algunas ausencias, destacando las de Augusto Farfus y Nicky Catsburg. Ambos se encuentran en el circuito de Laguna Seca para disputar las 8 Horas de California del IGTC. Los que no faltaron a la cita fueron las “leyendas” del certamen, como así los ha definido la organización. Hablamos del vigente campeón Gabriele Tarquini, de Yvan Muller, Robert Huff y Thed Björk, del bicampeón del mundo de Rallycross Johan Kristofersson, y de Andy Priaulx, que este año vuelve al campeonato donde se encumbró al olimpo del automovilismo.
Los equipos se centraron en preparar la puesta a punto de los coches y en seguir los procesos de adaptación de los pilotos que debutan este año. Lo mismo que Cyan Racing, que puso en pista los nuevos Lynk & Co. Los coches del fabricante chino todavía se encuentran en una fase de desarrollo, por lo que será difícil, a tenor de lo visto estos días, que luchen por las posiciones de privilegio desde el principio. Aunque en un campeonato tan impredecible, todo podría pasar.
El escocés Gordon Shedden fue el piloto más rápido de los test, con un 1:54.434, situando a su Audi RS3 LMS del Leopard Racing Team en lo alto de la tabla de tiempos. Los dos pilotos argentinos de Münnich Motorsport, Néstor Girolami y Esteban Guerrieri, llevaron a sus Honda Civic Type R TCR hasta la segunda y tercera posición. Por detrás, Jean Karl Vernay y Ma Qing Hua, que cerró el Top 5.
Por su parte, Mikel Azcona terminó en décimosegundo lugar final, con un crono de 1:56.305, conseguido en la mañana del segundo día. El navarro se tomó su tiempo en salir a pista el jueves, pues sus mecánicos seguían trabajando en los reglajes del coche una vez comenzó la sesión matutina. Azcona saltó al asfalto de Montmeló hacia la mitad de la sesión con el objetivo de completar el programa de puesta a punto para Marrakech y seguir aclimatándose a un entorno que es nuevo para él.
La curiosidad de estos entrenamientos la protagonizó el campeón en título Gabriele Tarquini. El italiano tuvo que suplir las ausencias de sus compañeros en los equipos Hyundai de Farfus y Catsburg, subiéndose a los coches de ambos para poder trabajar en sus set up, una vez terminó el trabajo en su propia montura. El otro piloto de la marca coreana, el húngaro Norbert Michelisz, completó el programa en la mañana del primer día y no volvió a establecer ningún tiempo en el resto de sesiones.
El dominador del Campeonato del Mundo de Rallycross el año pasado, Johan Kristofersson, llega al certamen tras la cancelación del programa que Volkswagen mantenía junto a la estructura de Petter Solberg en las series mundiales de la especialidad. El piloto sueco competirá con un Volkswagen Golf GTI TCR con el que marcó un mejor tiempo absoluto de 1:57.115, quedando en la parte baja de la tabla de tiempos. Esto no es para nada significativo, y aunque su experiencia en el campeonato de turismos escandinavo le servirá, todavía tiene que terminar de adaptarse a la copa del mundo, donde la exigencia de equipos y marcas es mayor.
El Team Mulsanne, operado por Romeo Ferraris, pone en pista los dos Alfa Romeo Giulietta Veloce TCR con los que compiten Ma Qing Hua y Kevin Ceccon. El piloto italiano reconoció que aún tienen trabajo por delante para terminar de ajustar el coche, pero se mostró optimista por las buenas sensaciones tras las pruebas. “Tenemos que aprender un poco más de estos nuevos neumáticos, pero las sensaciones son buenas. Hasta Marrakech no sabremos donde estamos”, comentó Ceccon. “No sé lo que podremos hacer con este coche, pero mi objetivo es llegar al podio”.
Este año hay una serie de cambios, como en el sistema de puntuación o la introducción del ‘Balance of Performance’. En base a ello, varios pilotos coinciden en que una de las claves este año será la regularidad. Así lo remarcó Esteban Guerrieri, quien destacó el hecho de que «puedes ser el más rápido del fin de semana y no sumar la mayor cantidad posible de puntos». Por ello, será importante la constancia durante todo el año, evitando incidentes en la salida, sobretodo con la inversión de parrilla para la segunda carrera. Guerrieri añadió que su objetivo «es llegar a la última carrera en mejor posición que el año pasado. Cualquier cosa puede pasar durante todo el año, pero por lo menos tener más opciones de luchar al final».
Han sido dos días de intenso trabajo, sobretodo para mecánicos e ingenieros dentro de los garajes, pero la preparación está lista. A partir de ahora será fuego real cuando los turismos del WTCR pisen el asfalto del circuito urbano Moulay El Hassan de Marrakech el próximo fin de semana, en casa de Mehdi Bennani. El piloto marroquí se mostró muy ilusionado por recibir el calor del público cada vez que compite allí como local, reconociendo que le da ánimos para empezar el campeonato con fuerza. Un campeonato que contará desde ese momento con un total de treinta carreras. Esas serán las pruebas que les esperan para determinar quién y quienes serán los campeones de 2019.
Foto de portada: © Pablo López Castillo (elacelerador.com)