El paisaje de la comarca del Sobrarbe cambia a medida que te acercas a las montañas más altas de la cordillera pirenaica. Hacia el sur, el sistema prepirenaico y al norte, los hermosos tresmiles. Pero es en mitad de todo ello donde se estableció hace diez años una empresa que entiende la competición automovilística como una actividad sostenible con el medio ambiente. Rodeada de campos y granjas, se encuentra la sede de Play and Drive, el sueño de Guillaume Meura y Gonzalo Parra.
Hace poco tiempo que disfrutan de sus nuevas instalaciones en Latorrecilla, un pequeño pueblo altoaragonés, situado al sur de Boltaña y Aínsa, las cabeceras comarcales. Es difícil imaginar que allí se estén desarrollando productos de alta tecnología que además de servir para el mundo de las carreras, también tienen aplicaciones en la vida cotidiana. Todo lo necesario para hacer mover un coche eléctrico tiene cabida en la funcional nave acristalada, donde desarrollan y prueban sus propios sistemas de propulsión.
Han pasado ya unos años desde que los vecinos del Sobrarbe pudieron asistir a la presentación de su primera criatura, un Volkswagen Golf MK2 al que equiparon con un sistema de motores eléctricos y baterías que ellos mismos prepararon. Se cerraron varias calles del Polígono Industrial Troteras de Boltaña y realizaron una exhibición que dejó con la boca abierta a los allí presentes. Así mismo, participaron en el Campeonato de Aragón de Velocidad, siendo el primer coche eléctrico en competir en el regional aragonés.
Pero las cosas no se quedaron ahí. Dado el éxito que cosecharon, continuaron para seguir creciendo en una variante del automovilismo que todavía no estaba tan explorada como hoy en día, pero que ofrecía interesantes oportunidades. Su siguiente trabajo en el apartado de las cuatro ruedas fue la electrificación de un Lotus Elise, al que equiparon con un sistema motriz propio, manteniendo la ligereza que caracteriza a los coches del fabricante británico. Poco antes, trabajaron en el desarrollo de una moto de prestaciones similares a las Moto3 del Campeonato del Mundo de Motociclismo, pero eléctrica.
En estos momentos, están focalizados en la organización y la puesta en marcha del Campeonato de España de eKarting, el nuevo certamen eléctrico bajo el paraguas de la Real Federación Española de Automovilismo (RFEdA). Play and Drive se encarga también de la fabricación y desarrollo de los vehículos, así como de su mantenimiento y puesta a punto. La idea no pasa por sustituir este por el actual Campeonato de España de Karting, sino coexistir cada uno con sus propias características. Y esa es la esencia que hace de Play and Drive una empresa de automovilismo eléctrico diferente.
La filosofía de esta empresa aragonesa contempla que las carreras de coches eléctricos deben tener su propia forma de ser, sin copiar el modelo que rige las competiciones de vehículos térmicos. Parten de la base de que los motores eléctricos no tienen nada que ver con los de combustión y, por lo tanto, no tiene sentido adaptar ese molde para los coches eléctricos. Simplemente, son diferentes; por lo que lo suyo es que las carreras también lo sean.
Para Play and Drive prima más el desarrollo de automóviles de competición que sean capaces de sacar el máximo de sus prestaciones en un tiempo limitado a que los mismos prototipos tengan que ir capados para completar más tiempo en pista. Esto es lo que sucede, por ejemplo, con la Fórmula E. La empresa de Guillaume Meura y Gonzalo Parra confía en poder ofrecer un producto distinto, en el que el piloto pueda disfrutar yendo a tope desde el principio, sin tener que preocuparse del ahorro de energía y otras variables intrínsecas a los coches eléctricos.
Tratando de conseguir alcanzar esos objetivos, Play and Drive desarrolla sistemas de propulsión basados en paquetes de baterías intercambiables formadas por pilas colocadas en celdas cilíndricas de 18 x 6,50. La ventaja que presentan respecto a otros tipos de baterías es que cada una de estas pilas puede ser reemplazada por una nueva, sin que las demás se vean afectadas, gracias a un procedimiento técnico ideado por ellos. Esto les permite poder seguir funcionando aunque una de ellas falle y, a su vez, reciclar los contenedores de las baterías, disminuyendo los elementos de deshecho en un claro afán por perjudicar lo mínimo posible el medio ambiente.
El futuro cercano de Play and Drive pasa por, además del Campeonato de España de eKarting -cuyo ganador tendrá la oportunidad de probar un Formula E de primera generación-, la preparación de una escalera que desde los karts eléctricos conduzca a los pilotos hasta la cúspide de las carreras de monoplazas propulsados por electrones en movimiento. Para alcanzar esta meta, cuentan con socios de gran prestigio en el mundo de las carreras eléctricas.
Además del apoyo de Pirelli y de Motorland Aragón, circuito en el que el año pasado batieron el récord de vuelta más rápida jamás dada por un kart eléctrico, tanto la RFEdA como la Federación Aragonesa de Automovilismo les ofrecen soporte. Colaboran con la empresa automotriz Tramontana, fabricante de coches de calle artesanales de altas prestaciones, y con QEV Technologies, empresa de competición que desarrolla sistemas de propulsión eléctricos para diferentes campeonatos.
QEV Technologies está desarrollando actualmente el prototipo para el nuevo eRX2 Series, el certamen de rallycross que servirá de escalón inferior al Projekt E, que debutó hace unas semanas en Suecia. Además, ponen en pista los Fórmula E del equipo Mahindra Racing, por lo que la relación entre ellos y Play and Drive es un verdadero impulso para la empresa aragonesa, de cara a consolidar su proyecto de escalera hacia la cumbre del automovilismo eléctrico.
Como parte de esa estrategia, Play and Drive se encuentra en pleno desarrollo de dos monoplazas eléctricos que ocuparían los peldaños intermedios entre los karts y la Fórmula E. Por un lado, está el Formula P&D 4.0, un coche de 650 Kg destinado a carreras de unos 15 minutos con una potencia de entre 110 y 140 kW (147,51 CV – 187,74 CV); y por el otro, el Formula P&D 3.0, de 810 Kg, que está ideado para mangas similares con una potencia de entre 170 y 220 kW (227,97 CV – 295,02 CV). Si los plazos se pudieran completar en las fechas estimadas, cosa que en la situación actual se hace complicado de asegurar, el Formula P&D 4.0 debutaría en pista entre el año que viene y 2022, mientras que el Formula P&D 3.0 lo haría entre 2023 y 2024.
El equipo de Play and Drive no descansa en sus objetivos. Sin embargo, la crisis sanitaria ha hecho posponer el Campeonato de España de eKarting hasta 2021. En cualquier caso, continúan trabajando con varios test en lo que resta de año para que, lo más pronto posible, los karts eléctricos nacidos en pleno corazón del Pirineo aragonés echen a rodar y muestren al mundo su auténtico potencial. El sueño de Guillaume Meura y Gonzalo Parra está cada vez más cerca de hacerse realidad.
Foto de portada: © Pablo López Castillo (elacelerador.com)