El legendario circuito de Spa-Francorchamps volvió a recibir a la caravana del Campeonato del Mundo de Rallycross este fin de semana. Con un trazado que siempre se ha caracterizado por ofrecer buenas carreras y con la subida al Raidillon desde Eau Rouge como telón de fondo, Johan Kristoffersson se hizo fuerte para llevarse al bolsillo la final y ganar el Rallycross de Benelux, manteniendo el impulso que encontró en la anterior cita en Bikernieki.
Los cambios en la pista se notaron desde el comienzo, con la gran modificación en lo referente a la bancada de la última curva. El característico peralte en tierra ha desaparecido, lo cual no fue del gusto de los aficionados, ni de los pilotos; y el enorme polvo en suspensión provocó malestar al disminuir la visibilidad. Sin embargo, esto no fue inconveniente para que el espectáculo fuera mayúsculo, con la pelea por el campeonato por todo lo alto.
El sábado empezó la acción con la sorpresa de ver a Kevin Abbring como el piloto más rápido en la Q1. El neerlandés aprovechó la lentitud de la carrera en la que Johan Kristoffersson y Niclas Grönholm lucharon cuerpo a cuerpo para marcar el mejor tiempo. No obstante, el sueco recuperó la vitola de favorito en la siguiente sesión, marcando el mejor registro en una Q2 que tuvo de todo, destacando el accidente de Grönholm durante el mano a mano en la salida que mantuvo con Kevin Hansen.
Johan Kristoffersson y Niclas Grönholm en su particular mano a mano en la salida de la Q1 en Spa-Francorchamps. Foto: Red Bull Content Pool.
Sin embargo, esto no impidió al finlandés resarcirse cuando la competición se retomó el domingo, ganando la Q3 con autoridad ante un Kevin Hansen que vio impotente cómo se le escapaba la victoria. El piloto de GRX Set buscó repetir en la Q4, pero fue Abbring el que consiguió llevarse el máximo de puntos de calificación para asegurarse la Pole Position, aunque empatando a tantos con Kristoffersson, siendo hasta la fecha el mejor resultado en las mangas de calificación del piloto neerlandés.
De esta forma, todo quedó sentenciado de cara a las semifinales en las que se decidirían los puestos para la decisiva final. Abbring aprovechó su posición de privilegio para ponerse al frente, pero en la horquilla del Raidillon, Timmy Hansen le tocó por detrás, provocando el trompo del piloto de UNKORRUPTED y siendo el sueco quien tomaba la delantera a partir de ese momento. Los hermanos Hansen se escaparon al frente, mientras tanto Abbring como Timo Scheider abandonaban la carrera. Finalmente, los suecos entraron primeros en meta, aunque la posterior sanción al mayor de ellos por el toque con Kevin Abbring le relegó a la tercera plaza, lo cual no evitó su pase a la final. El tercero en discordia fue Anton Marklund, que convenció una vez más en su regreso al Campeonato del Mundo de Rallycross.
Kevin Abbring liderando el pelotón en el Rallycross de Benelux. Foto: Red Bull Content Pool.
En la segunda semifinal, Johan Kristoffersson defendió hasta el límite posible la primera posición ante Niclas Grönholm, llegando a producirse el contacto entre ambos. El finlandés perdió levemente el coche, pero lo suficiente para caer a la última posición de la que pudo recuperarse a base de ritmo pero sin llegar a alcanzar la tercera posición que le hubiera dado el pase a la final. Kristoffersson impuso un ritmo inalcanzable que le dio la victoria, acompañado en el camino a la carrera decisiva por Krisztián Szabó y su compañero en el equipo KYB JC, Enzo Ide.
Con la máxima expectación posible, se puso en verde el semáforo por última vez en Spa-Francorchamps. Kristoffersson se defendió de manera impecable de Kevin Hansen, dejando por detrás el grueso de la batalla. Timmy Hansen trató de recuperar posiciones, pero se encontró con el muro infranqueable de Krisztián Szabó. El húngaro cerró todas las puertas posibles y se ganó a pulso un puesto en el podio. Johan Kristoffersson mantuvo la firmeza para llevarse la victoria, por delante del pequeño de los Hansen.
Johan Kristoffersson volando hacia la victoria. Foto: Red Bull Content Pool.
Andreas Bakkerud sentencia el Campeonato de Europa de RX1
Spa-Francorchamps vibró con la magia del mundial de rallycross, pero también lo hizo con las categorías RX1 y RX3 del Campeonato de Europa y con los RX2e de la segunda división eléctrica. En la principal del certamen continental, Andreas Bakkerud se llevó la victoria en la pista belga para certificar su título de Campeón de Europa de Rallycross. El noruego lo hace después de una larga pretemporada en la que su continuidad entró en barrena, encontrando acomodo en el Euro RX1.
Por su parte, Yuri Belevskiy se metió en el bolsillo un nuevo triunfo que le sitúa como el gran favorito para el título. El ruso batió, entre otros, a un joven Kobe Pauwels que se encontró con la diatriba de competir en la carrera de casa o cumplir con su compromiso con el FIA Cross Car Academy Trophy y viajar a España para participar en la penúltima ronda del campeonato en Mollerussa.
Andreas Bakkerud celebrando el título de Campeón de Europa de Rallycross. Foto: Red Bull Content Pool.
De Ridder gana en casa en el mejor fin de semana de Pablo Suárez
El belga Guillaume de Ridder se deshizo de todos los fantasmas para conquistar la primera posición ante su público en el Campeonato de Rallycross RX2e. Así mismo, el canario Pablo Suárez firmó su mejor actuación de la temporada, consiguiendo la quinta posición en la final, a la que accedió después de terminar segundo en la semifinal y ganar su serie en la Q2. Junto a él, Laia Sanz y Christine Giampaoli completaron la mayor participación española de la historia en la segunda categoría de rallycross a nivel internacional, siendo el regreso a Sanz a la especialidad y el debut de la ítalo-canaria.
Foto de portada: Red Bull Content Pool.
