Circuito Antonio Vadillo, Miranda de Ebro (Burgos). | Después de más de un año, el rallycross ha vuelto al Circuito Antonio Vadillo de Miranda de Ebro. La pista burgalesa, conocida en este ámbito por ser una de las sedes del nacional de autocross, acogió la primera cita del Campeonato de Castilla y León de Rallycross, el hasta la fecha único certamen de estas características en España. Jesús Santillán fue el piloto que consiguió llevarse la victoria en una cita en la que, además de vehículos para rallycross de cuatro y dos ruedas motrices, también participaron monoplazas de autocross y carcross.
El cuerpo organizativo que conforma el Automóvil Club Mirandés dejó el circuito en perfectas condiciones, configurando un trazado mixto que alterna varias zonas de asfalto y tierra aprovechando la característica de tener ambas pistas discurriendo paralelas, lo cual fue del agrado de los pilotos y del apasionado público que pudo vivir de primera mano el espectáculo de las sesiones cronometradas, calificatorias y finales de rallycross.
Los coches de División I y División II, agrupados en las mismas carreras, fueron los primeros en dar rienda suelta a la potencia de sus motores en Miranda de Ebro. Pablo Vélez, al volante de un BMW 340I, fue el más rápido y se adjudicó la Pole Position, por delante de Joseba Frutos y Jesús Santillán. Pero este no era más que el comienzo de una larga jornada de competición en la que estos turismos iban a dar mucho juego.
Batalla intensa en la primera manga de calificación del Rallycross de Miranda de Ebro. © Pablo López Castillo (elacelerador.com).
La primera manga de calificación tuvo varias sorpresas, con los dos ruedas motrices superando a los vehículos de tracción a las cuatro ruedas. En la primera vuelta, varios pilotos probaron de primera mano la complejidad del Circuito Antonio Vadillo, teniendo algunos problemas en las curva dos, la cual actúa de transición entre tierra y asfalto. Santillán fue el primero en caer en esa especie de trampa, pero no fue el único, lo cual le condenó a perder varias posiciones. Javier Salas aprovechó la situación y puso en cabeza su Peugeot 306 para cruzar bajo la bandera en primera posición.
Joseba Frutos, al volante de un Opel Astra, tuvo la oportunidad en la segunda manga, la cual no estuvo tampoco libre de ciertas sorpresas y en la que los División I volvieron a ceder ante los División II. Jesús Santillán tuvo la oportunidad de llevarse el gato al agua, pero ni él ni Pablo Vélez pudieron evitar el triunfo de Frutos en una carrera en la que Salas fue penalizado por saltarse la salida.
Jesús Santillán intentando superar a Javier Salas camino del salto del Circuito Antonio Vadillo. © Pablo López Castillo (elacelerador.com).
La situación regresó a una cierta normalidad a partir de la tercera manga, con los División I por delante de los División II. La batalla en esta ronda y en la cuarta fue de alto voltaje, una vez más, destacando la variabilidad estratégica que supone la Joker Lap y que en el Circuito Antonio Vadillo fue capital. Jesús Santillán se llevó al bolsillo el triunfo en ambas carreras, seguido por Pablo Vélez en las dos carreras. De esta manera, el piloto castellano-leonés, uno de los habituales del CEAX, ganó el derecho a arrancar al frente en la final.
En esta, el piloto al volante del Mitsubishi Lancer Evo no dio ningún tipo de opción, escapándose de su principal rival, Pablo Vélez, en los primeros metros. Con una cierta ventaja, realizó su paso obligatorio por la Joker Lap, reincorporándose en cabeza, lugar que mantuvo hasta el final para cruzar la meta como ganador del Rallycross de Miranda de Ebro – Trofeo Circuito Antonio Vadillo. Pablo Vélez se defendió de los ataques de Joseba Frutos, Javier Salas y Martín Santamaría para asegurarse la segunda posición, con Frutos entrando en tercera plaza.
Jesús Santillán defendiéndose de Pablo Vélez. © Pablo López Castillo (elacelerador.com).
Luis Ángel Muñoz en División III e Imanol Vicente Sanzberro en Carcross se llevaron las victorias en Miranda de Ebro
La actividad en pista tuvo su máximo aliciente en las categorías reservadas para los monoplazas de autocross (División III) y carcross, que gozaron de una gran participación. Luis Ángel Muñoz casi no tuvo rival entre los potentes monoplazas en las mangas de calificación, llevándose tres de cuatro victorias, únicamente superado en la segunda de ellas por un Óscar Martínez que logró imponer su Semog al Zapacar de Muñoz. Pero en la final, el burgalés no dio ningún tipo de opción e impuso su experiencia y manos al volante para llevarse la victoria, por delante de Martínez y Hugo Ortiz.
En lo referente a los numerosos carcross que se vieron en pista, lo cual es síntoma habitual dado el gran parque móvil de este tipo de coches que existe en nuestro país, se llevaron a cabo hasta cuatro series con sus respectivas mangas, con un patrón de competición que se vive en muchos otros campeonatos de rallycross a nivel internacional. Kevin García, Ion Otaño e Imanol Vicente Sanzberro fueron los tres pilotos que se repartieron las victorias, con García partiendo al frente en la final. En esta, fue Vicente Sanzberro en el que logró imponerse, ganando por delante de Jokin Aiertza y Luis Fernando Eguiguren.
Luis Ángel Muñoz al volante de su Zapacar durante la final de División III del Rallycross de Miranda de Ebro. © Pablo López Castillo (elacelerador.com).
Con el sol cayendo lentamente sobre Miranda de Ebro, terminó la primera prueba de rallycross del año dentro de nuestras fronteras que ha sido la primera también del único campeonato de la especialidad que se celebra en España. El trabajo del Automóvil Club Mirandés en todos estos años ha sido encomiable y en esta ocasión más todavía, dadas las complicaciones que todavía existen por la situación que se está atravesando. Un gran primer plato para estas dos semanas en las que el rallycross es la disciplina protagonista en nuestro país.
Foto de portada: © Pablo López Castillo (elacelerador.com).
