Algunas voces ya anunciaron que había que tener un ojo puesto en cierto chaval que prometía mucho. Cuando con su casco de tonos azules dio el salto del karting a los monoplazas, las miradas se posaron en él. Destacó desde el principio, aunque la mala fortuna y la inexperiencia le jugaron alguna mala pasada en sus primeras incursiones en el Campeonato de España de Fórmula 4. Sin embargo, todo cambió aquel fin de semana en Motorland Aragón, donde Pepe Martí puso su primera piedra hacia el asalto de la genialidad.
Con un ritmo impecable y una fuerza mental sin igual, Martí se llevó al bolsillo dos de las tres victorias en juego en el trazado de Alcañiz, uno de los más complejos y desafiantes del certamen. El catalán había aprendido muchas lecciones en sus visitas a Spa-Francorchamps, Navarra y Portimao, especialmente en lo referente a las salidas y a como sus rivales gestionaban la situación cuando esta se salía de la norma. Pepe pagó la inexperiencia, pero aprendió. Guardó en su disco duro mental toda esa información, la analizó y la asimiló. Todo ello, fue en su favor. Estaba listo para ir a por todas.
Pepe Martí desprende una entereza y una seriedad palpable cuando cruzas unas palabras con él. Nunca dirías que es un joven piloto, da la sensación de que es un adulto, un piloto en plena madurez, dentro del cuerpo de un chaval. Es firme y contundente en sus palabras, como lo es en las batallas cuerpo a cuerpo que lidia cada fin de semana de carreras en la pista. Esa es, quizás, su mayor baza, la cual explica su rendimiento excepcional en esta “pretemporada”, peleando por el título del Campeonato de Asia de Fórmula Regional (FRAC).
Pepe Martí está yendo por la senda que le conduce hacia el asalto de la genialidad. Nadie -o, mejor dicho, muy pocos- esperaba que el joven catalán estuviera a falta de tres carreras luchando por la máxima gloria en el certamen que se disputa a caballo entre los circuitos de Dubái y Yas Marina. No porque se dudara de su talento, sino porque algunos de los nombres que figuran en él tienen más experiencia que él y han competido en 2021 en certámenes de este nivel. Recordemos que Martí ha ascendido desde la Fórmula 4 a la siguiente categoría superior, en un camino que le lleva directo a la Fórmula 3.
Habiendo sumado varios podios pero sin haber catado la victoria, Martí es segundo de la general, batallando contra Arthur Leclerc, el hermano menor de Charles Leclerc, que lidera la tabla. Esto, ya es sorprendente de por sí para un piloto con apenas un año de experiencia en monoplazas en comparación con otro que porta cuatro a sus espaldas. Pero, si echamos la vista hacia sus perseguidores en la clasificación, observamos un hecho todavía más sorprendente, con nombres que en los últimos tiempos han sorprendido de veras y están llamados a ser el futuro de la disciplina, en su camino hacia la Fórmula 1.
Isack Hadjar, con tres años de experiencia, destacó el año pasado en la FRECA con dos victorias y grandes peleas contra los favoritos. Sebastián Montoya (hijo del legendario Juan Pablo), dos años en monoplazas en los que ha sumado experiencia en la Fórmula 4 italiana. Dino Beganovic, uno de los mejores kartistas de los últimos tiempos que cuenta con dos años de experiencia en monoplazas y es piloto de la Ferrari Driver Academy -como Arthur Leclerc-. Por no hablar de Jak Crawford, Gabriele Minì, Hadrien David, Lorenzo Fluxá o Paul Aron, todos de sobra conocidos en estos ambientes y con más experiencia que Martí.
Es tan sencillo como asomarse a esa clasificación general para ver que lo que está haciendo Pepe Martí en estos meses invernales es absolutamente extraordinario, sin ni siquiera pilotar para el equipo más potente del certamen, y pone en valor la brutal temporada que firmó el año pasado en el Campeonato de España de Fórmula 4. Verle competir es un verdadero espectáculo que gana enteros cuando se hace de forma presencial, demostrando que tiene manos y talento para ganar donde sea.
Algunas voces dudaron de su fichaje por Campos Racing para disputar el Campeonato de Fórmula 3 este 2022, alegando que su paso desde la F4 española era un salto demasiado grande para un piloto de su corta experiencia. Esto es cierto, el abismo es enorme y no todo el mundo está preparado. Pero, viendo lo que está haciendo en la FRAC, no hay dudas ya de que será uno de los nombres a tener en cuanta conforme avance la temporada. Antes, su cita con la historia le espera en Abu Dabi este mismo fin de semana. ¡Que la suerte le acompañe!
Foto de portada: © Pablo López Castillo (elacelerador.com).